martes, 7 de octubre de 2008

Otro incendio en un centro de menores saturado (y van...)


El País informa de un nuevo incendio en un centro de menores que superaba con creces la capacidad para la que estaba edificado... Adjuntamos la noticia completa.

El centro de menores de Monteolivete, en Valencia, sufrió ayer un incendio en el que no se registraron heridos y que que fue rápidamente controlado, según confirmó la Consejería de Bienestar Social. El incidente se produjo hacia las 15.30, a la hora del cambio de turno, cuando un menor prendió fuego a un colchón, según fuentes consultadas, que destacaron la elevada saturación de estas instalaciones. Preparado para acoger medio centenar de plazas, el recinto se encuentra con una ocupación cercana a los 90 internos, de acuerdo con las mismas fuentes.

Unidades de los bomberos, así como vehículos sanitarios se desplazaron al internado, pero cuando llegaron el fuego ya había sido controlado por parte de personal del centro. Sin embargo, en la zona afectada persistía un intenso olor a humo así como desperfectos. Por ello, a última hora de la tarde, unos 40 chavales del pabellón dañado se disponían a a pasar la noche en el sótano, que fue acomodado para acoger a los menores.
El centro de Recepción de Menores de Monteolivete alberga en su amplia mayoría a menores inmigrantes no acompañados. Su función es atenderlos antes de derivarlos a otros recursos asistenciales, pero debido a la saturación de otros centros, a pesar de que teóricamente la estancia máxima en Monteolivete debería de ser 45 días, pueden pasar varios meses.
Un gueto
El mes de noviembre del año pasado estas mismas instalaciones fueron inspeccionadas por la que por entonces era fiscal coordinadora de Menores, Teresa Gisbert, tras las denuncias de saturación publicadas en prensa y difundidas por el sindicato UGT. Gisbert describió el internado tras la visita como "un gueto; un un centro de recepción que funciona como un centro de extranjería de menores". Entonces, la fiscal comprobó que de los 74 internos, 70 eran extranjeros y que estaba preparado para acoger, como mucho, a no más de 60 chavales en sus dependencias.
Bienestar Social explicó que el aumento de internos que se había producido se había debido a un incremento puntual de acciones policiales que habían dado como resultado el incremento de ingresos de menores inmigrantes, por lo que se habían instalado plazas extra y se habían desdoblado camas para acoger a los nuevos internos.